Hoy paso por tu lado y casi ni te veo, hoy percibo el olor que ayer me recordaba a ti y ahora se pierde entre la multitud, ni siquiera una mirada tuya me hace vibrar.
Hoy tan sólo siento que estoy yo y que sólo me basta eso para poder sonreir, para poder caminar, para poder sentarme en cualquier lado de Granada y tan solo estar mi mente y mi cuerpo.
Siento que mi mente puede quedarse en blanco y que hoy tus recuerdos tan sólo son eso recuerdos.
Hoy no puedo evitar reirme de las estupideces que hice y sólo sentir que forma parte de mi historia y es que tan rápido como todo viene a veces tan rápido se va.
Y es que mis manos no paran de escribir capítulos en este libro en que las hojas pasan fugaces que casi no me da tiempo a anotar, en el que cada día al despertar tengo ganas de seguir llenando de vida, de experiencias, de alegrías, de tristeza, por que no quiero parar de sentir, por que no me apetece estar siempre en la misma página.